
Han transcurrido 242 días de aquella final ante Corinthians que significó el alejamiento transitorio de Juan Román Riquelme. Siete meses después, y con sólo tres semanas de preparación, el “10” se destacó en un Boca que se vio claramente superado por el débil Unión de Santa Fe, y en la mismísima Bombonera.
Riquelme tuvo un rendimiento aceptable en relación a la falta de competencia pero, en la comparación con el resto de sus compañeros –a excepción de Cristian Erbes, Walter Erviti y Sebastián Palacios- su actuación fue superlativa en el conjunto del “Virrey”
Si bien el “10” se recostó mucho por la banda izquierda y se alejó de la zona de fricción en el mediocampo, tuvo mucha intervención en la generación de juego. En la primera etapa apostó al pase seguro y en los primeros 15 minutos del complemento se destacó con 4 o 5 disparos al arco. Luego, consumado el 3 a 0, se encargo de reservar energías de cara a la seguidilla de partidos que se avecinan.
En lo estrictamente estadístico, LaMitadMas1 hizo un seguimiento exhaustivo del partido de Riquelme ante Unión y, a continuación, se detallan algunos datos relevantes:
– Riquelme tocó 30 pelotas en el primer tiempo y 34 en el complemento. Sólo falló en 11 jugadas.
– Esa participación en el juego se produjo por haber recibido 56 pases de sus compañeros y haber recuperado 8 pelotas.
– En su intervención con la pelota, sólo perdió 6 veces y dio mal 5 pases. Por el contrario, entregó bien 39 pases cortos y tiro 5 cambios de frente, aunque no tuvo asistencias a los delanteros.
– Como se mencionó precedentemente, pateo 1 vez al arco en el primer tiempo y 5 en el complemento. Sólo 1 vez fue dentro del área y desvió 4 remates.